divendres, 31 d’agost del 2012

FACERIAS: ERRORES A SUBSANAR


Desde hace años se vienen efectuando homenajes a la figura del último guerrillero urbano, Josep Lluis Facerías, conocido como “Facerías”. Las concentraciones, más o menos numerosas, se vienen celebrando a última hora de la tarde, coincidiendo con el aniversario de su muerte, el 30 de agosto de 1957. El lugar escogido es donde cayó abatido, en la confluencia de Pi i Molis con Pg Verdum, en uno de los barrios de Nou Barris. Una humilde tapa de cloaca, que para muchos pasa desapercibida, recuerda la efeméride
En casi todos los textos que se han publicado, aparece el lugar de nacimiento como el barrio del Poble Sec, y algún autor afirma que nació en la Calle de Magallanes.
En un articulo titulado “EL BARRIO Y SUS HISTORIAS. JOSE LUIS FACERIAS”, publicado en octubre de 1997, con motivo del 40 aniversario de su trágica muerte, en la revista  L’ARXIU, del Arxiu Històric Roquetes Nou Barris, se cita que nació en la hoy desaparecida calle de La Cadena nº 30, calle situada entre las calles de Sant Pau y de Hospital, del barrio del Raval. Tanto sus hermanos Bartolomé y Fernando nacieron en la misma ubicación. El hermano pequeño, Ricardo, si que nació en el barrio del Poble Sec, en la C. Margarit.
 
 
En un articulo relativo a “Facerías”, titulado “La emboscada”, publicado ayer en un rotativo de alcance nacional, se  puede leer textualmente, que “El guerrillero llegó al lugar del encuentro en un taxi, ignorante de la suerte que habían corrido sus amigos”. En el libro “Detrás del muro”, de José Molina, uno de los varios testigos que se encontraba por la zona dicho día, y después de confrontar datos con otros testigos, muchos años más tarde, se asegura por un niño que iba bajando por el Paseo de Urrutia que “un hombre que venía de frente  en bicicleta por el Paseo de Verdún, lo ametrallaron desde detrás del alto muro del Manicomio y cayó al otro lado del murete que había en el paseo”.
Son dos pequeños detalles, pero que pienso, hay que remarcar en la biografia de “Facerias”.
 
 
 
                                                             
Roberto Lahuerta Melero

dilluns, 27 d’agost del 2012

NOMENCLATOR DE NOU BARRIS: MARÍA ÁNGELES RIVAS UREÑA

Mª Ángeles Rivas en el documental “Barrio”
 
María Ángeles Rivas nació en Turquito (Marruecos), el 27 de febrero de 1935, hija de un herrero que iba por tierras africanas colonizadas. Su familia paterna era originaria de Ávila y había emigrado en 1896. Su madre llegó a Nador a los 14 años.  Durante sus primeros años, la familia pasó muchas penalidades. Durante un tiempo se dedicó a vender chucherías en los zocos. A los 11 años marchó con la familia a Torres de Alcaraz, un pueblecito judío-marroquí. Desde muy pequeña siempre le atrajeron los libros. Aprendió por un libro que le dejó un vecino que era maestro. Utilizaba para estudiar una vela. Consiguió aprobar el curso, pero su padre decidió trasladarse de residencia a Tánger. Allí consiguió seguir estudiando, mientras trabajaba. Dormía muy poco y cayó enferma. Deseaba estudiar Derecho para defender a los delincuentes juveniles. Se casó a los 22 años y marchó a vivir a Casablanca. Estuvo trabajando durante unos meses en Suiza hasta que, embarazada del segundo hijo, regresó a Casablanca. Se separó a los 29 años. En Casablanca, con dos niños, le denegaron un trabajo, por su condición de española. Decidió venir a Barcelona. Residió en una pensión de la plaza Real. Con posterioridad vino a residir al barrio de La Guineueta. A los 30 años tomó conciencia de las doctrinas marxistas y contactó con militantes del PSUC. Fue una de las activistas más conocidas de Nou Barris. Fue presidenta de la A.VV. de La Guineueta. Durante un tiempo fue presidenta de la A.VV. de Nou Barris, tras suceder en el cargo a Manuel Vital.
 

 
Desde finales de 1971, en que el Ayuntamiento sólo quería abonar entre 60000 y 23000 pesetas por las expropiaciones de sus viviendas a consecuencia de las obras del Cinturón de Ronda, se puso al frente de las luchas vecinales, y de seguida tuvo a los vecinos a su lado. Se reunían en el local de la Asociación, un viejo caserón de la zona. El 8 de abril de 1976 estuvo al frente de las movilizaciones para impedir el paso de las excavadoras que pretendían entrar en La Guineueta Vieja. Detrás de ella estaban los vecinos que se movilizaron. Estas acciones de impedir los derribos se produjo en varias ocasiones y siempre con más cantidad de vecinos movilizados, sobre todo con la participación de mujeres. Se solicitaba un piso en el polígono de Canyelles, que todavía no estaban construidos. La plataforma unitaria fue defendida por toda clase de acciones: manifestaciones en San Jaime, en el barrio, con tal de forzar un compromiso por parte del Ayuntamiento. Después de larga lucha el Ayuntamiento se comprometió a facilitar un piso a los expropiados. Se propuso una vivienda en Ciudad Meridiana provisionalmente, pero no fue muy aceptada. La lucha siguió hasta que quedaron cubiertos todos los servicios. Esta lucha, dirigida por Maria Ángeles llevaba mucho tiempo, desde los oscuros tiempos de los alcaldes Porcioles, Massó y Viola a favor de los grandes especuladores. Como ella decía: “no fue fácil pero fue posible”. En 1975 durante el conflicto del Mental fue encarcelada brevemente. Su vida estuvo marcada por la disposición de lucha contra la injusticia. Su imagen puede verse en una muy conocida fotografía de Armengol, durante la primera gran manifestación por la amnistía de febrero de 1976. Esta imagen fue portada de un libro.
 

Su último domicilio fue en la calle de San Gabriel nº 15. Falleció, después de una larga enfermedad gástrica en una residencia del barrio de Canyelles, el 29 de febrero de 1996. Los vecinos del barrio de Canyelles le hicieron un merecido homenaje el 1 de marzo, paseando su féretro por el barrio.
Su nombre fue incluido en el nomenclátor barcelonés, en una de las calles que surgieron de la remodelación del terreno de las cocheras de Borbón, tras la aprobación en el Pleno Municipal del 6 de julio de 2010.
 
 
Roberto Lahuerta Melero
 

dilluns, 20 d’agost del 2012

Els tramvies-escola de Torre Baró



El fenomen dels tramvies-escola del barri de Torre Baró, batejats pel periodista Josep Maria Huertas Claveria al seu article de la revista Destino de l’any 1967 com a “escuelones”, va ser un fet històric comparable al de països subdesenvolupats. En canvi, però, es va donar a Barcelona ciutat, en ple apogeu de l'anomenat "miracle econòmic".
Els barris de la perifèria obrera barcelonina i d'altres zones considerades suburbials patien seriosos problemes d'equipaments educatius, ja que no hi havien prou escoles i eren molts els nens i nenes d'aquells llocs que estaven sense escolaritzar. Per resoldre el problema, la regidora falangista i presidenta de la Junta Municipal d'Ensenyament, Montserrat Tey, va decidir optar per una solució provisional mentre restava pendent la construcció de diversos grups escolars allà on feien més falta. Es tractava d'unes barraques prefabricades cedides pel Ministeri de l'Habitatge que funcionarien com a aules.


El barri de Torre Baró es va convertir en un dels llocs agraciats amb aquesta solució. Ara bé, davant la manca de pressupost i de disponibilitat fins i tot per aconseguir barracons, es va optar per l'adquisició de dotze tramvies procedents de la companyia Tramvies de Barcelona, ​​que es desproveïren de motor, controla, tròlei i seients per habilitar-ne el seu interior com a aules escolars, amb pupitres per a dos alumnes cadascun, una taula, una pissarra per al professor i, és clar, els corresponents mapes geogràfics d'Espanya i els retrats de Franco i José Antonio. Aquesta solució va ser possible perquè la xarxa tramviària estava en procés de desmantellament i sobrava material mòbil que mai més no tornaria a circular. La cessió, gratuïta, va estalviar temps (per la seva ràpida instal·lació) i diners. Cada tramvia tenia cabuda per a trenta alumnes, la qual cosa significava una capacitat total per a uns 400 nens i nenes sumant tot el conjunt allà emplaçat al costat del berenador de la Font dels Eucaliptus. Inicialment, només es van matricular 270 alumnes. Havien dos models de tramvies: els de la sèrie MT200 destinats per a la secció de nens, i els de la sèrie 800, destinats per a nenes. El grup de dotze tramvies-escoles va ser batejat com a Grup Escolar Sant Joan.


El número 7 del Butlletí Informatiu de Tramvies de Barcelona corresponent a l’octubre de 1967 va treure un petit reportatge elogiant la “brillant” idea d'instal·lar tramvies-escoles i que deia així: "A la barriada de Torre Baró s’hi han instal·lat dotze tramvies retirats del servei que s'utilitzen en el curs normal com a escoles d'ensenyament primari. D'això, la premsa en va donar àmplia informació, però voldríem que quedés com un fet singular d'aquella Barcelona que molts ignoren. Als barris extrems, que amb excessiva rapidesa s'han anat poblant, convertint-se en autèntiques ciutats per la seva densitat, manca aquest mitjà indispensable de l'escola per a formar els futurs ciutadans. El fet que en aquest espai a mig urbanitzar ha pres el nom d'avinguda d’Escolapi Càncer, assenyala amb precisió que s'ha entès el que ha d’ésser l'escola. No és pas l'edifici el més important sinó allò que hi ha a dins, és a dir, professors i alumnes. Les grans escoles de l'antiguitat clàssica es donaven als jardins, a l'aire lliure. Aleshores, per què no es pot fer una cosa semblant avui en dia si hi ha dificultats per a la ràpida construcció d'edificis? I així entenc que aquests tramvies venen a resoldre, encara que sigui provisionalment, aquest problema vital de Barcelona ".


Finalment, l'any 1971 va ser inaugurat el nou edifici del col·legi Font dels Eucaliptus, la qual cosa va significar l'eradicació definitiva dels tramvies-escola o "escuelones" i el trasllat dels seus alumnes a un espai amb millors condicions per a l'ensenyament públic.

divendres, 10 d’agost del 2012

AGOST. El penúltim relleu del tramvia a l’autobús



El 18 d’agost de 1970 la línia 50 de tramvies es va substituir per autobusos, fet que es celebrà amb un acte de comiat organitzat per Tranvías de Barcelona amb una comitiva tramviaire. Les nombroses persones assistents van rebre un bitllet commemoratiu i se’ls va oferir una ampolleta de xerès amb una etiqueta al·lusiva a l’acte. També van participar directius de la companyia i autoritats locals, entre elles el president de Tranvías de Barcelona Julio Sanmiguel Arribas, el director tècnic Manuel Conde, el director administratiu Emilio Hap i el cap d’incidències Santiago Benito. L’acte va acabar amb un brindis amb cava ofert pel mateix president. Un tramvia i un autobús es van estacionar al mateix nivell un al costat de l’altre, i els respectius conductors van baixar de llurs vehicles i es van donar la ma simbolitzant el relleu del vell al nou mitjà de transport. Mereix la pena esmentar el “civisme” del públic, que va arrencar bombetes, agafadors, seients, rètols i altres objectes dels tramvies, però la premsa de l’època li restà importància tot explicant que “El útlimo recorrido se efectuó animadamente. Los pasajeros se dedicaron a arrancar bombillas, asideros, asientos, letreros y otros objetos hasta casi desguazar el vehículo. Hay coleccionistas para todo, hasta para llevarse el “tranvía a casa”. Amb la posta en servei dels utobusos a la línia 50 va alterar els sentits de circulació del seu itinerari, passant a circular pels carrers de Mallorca i Indústria en sentit Via Júlia i per Sant Antoni Maria Claret i Provença en sentit plaça d’Espanya.
A la mateixa data va entrar en servei la línia 51 (Atarazanas-Via Julia), la darrera línia de tramvia inaugurada a Barcelona.

Ricard Fernández i Valentí